Su mujer y su hija se van de compras y no acaban de irse
nunca. Ya en el coche, le piden el móvil, que siempre olvidan en cualquier
parte. Y la hija sale del coche para ir por última vez al baño. Y la mujer
entra en casa y vuelve a salir, tras cambiar de idea sobre el calzado que más
la favorece. Y aún antes de poner el motor en marcha, quieren que les traiga el
paraguas por si empieza a llover. Y cuando se van de una vez por todas, el
hombre se queda en la calle, sin llaves para entrar en su hogar. Entonces se
sienta en un banco del parque, dispuesto a no dar la menor importancia a un
suceso anecdótico. Y se percata de que en su vida todo es anecdótico y sin la
menor importancia. Salvo cuando eleva esta clase de pequeñeces a la categoría
de problemas. O cuando es incapaz de doblar la cintura ante situaciones que
solo requieren un poco de agilidad. O de arrimar el hombro de manera altruista,
no como un esfuerzo excepcional sino como una simple declaración de principios.
También se da cuenta de que admitir sus debilidades es el primer paso para
superarlas. Y de que él tampoco recuerda dónde demonios ha dejado el móvil. Y
de que el calzado que lleva puesto no le favorece en absoluto. Y de que tiene
ganas de ir al baño. Y de que empieza a llover.
Tomado de la bitácora Humor mío
Pedro
Herrero por Pedro Herrero.
Nací en Badalona y resido en Castellar del Vallès, provincia de
Barcelona. Escribo microrrelatos desde el verano de 2006, centrados
preferentemente en el terreno del humor. Parte de mi trabajo aparece en varias
antologías, como “Velas al viento – los microrrelatos de La nave de los locos”,
(editorial Cuadernos del vigía- 2010), “De antología – la logia del
microrrelato”, (Editorial Talentura-2013) y “Despojos del REC”, (editorial
Bombín rojo-2014). Soy editor de microrrelatos en la revista digital “En
sentido figurado” (http://ensentidofigurado.blogspot.com)
y gestiono la bitácora “Humor mío” (http://humormio.blogspot.com),
donde publico mis textos con periodicidad mensual.
Y a quien no le pasado? excelente la mini de Pedro Herrero.
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