Comienzas
despacio tu tarea. El cuchillo rasga la piel de la fruta y tus manos se cubren
de un líquido fresco que te transforma la mirada. La pelas. Y se me ocurre que
en cada pedacito caracoleado de cáscara se van tus recuerdos y nuestros
nombres.
Nos miras sin saber bien quiénes somos y sonríes mientras saboreas un trozo de
durazno en una siesta santiagueña, bajo tu parra, en el patio de nuestra
infancia, papá.
María del Carmen Pilán. Hija de padres santiagueños, vive en Tucumán desde 1986. Licenciada y Doctora en Letras, está a cargo de las cátedras de Italiano Lengua Extranjera y Sociolingüística de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán.
Ha participado en rondas de lecturas de microrrelatos y poesías tanto en la ciudad de Santiago del Estero como en Tucumán. Obtuvo el segundo premio en el Concurso Literario PSI XXI organizado por el Colegio de Psicólogos de la ciudad de Santiago del Estero ( 2003), en la categoría Cuento Brevísimo, con el microrrelato “Final de mito” y en la categoría Poesía con el poema “La mujer de Picasso”.
Ha publicado sus textos en revistas y blogs. Ha traducido al italiano los microrrelatos de Rogelio Ramos Signes, Julio Estefan y Carlos Eduardo Sánchez que integran la antología La vita in brevi , Colección La hormiga escritora de La aguja de Bufón ediciones.
Qué intensa descripción de gesto y mirada y, al final, el alma queda caracoleando como la.piel del durazno.
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